¡Haz algo que te apasione cada día y sigue tu corazón! – Porque la vida sin pasión es como café sin cafeína

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¿Alguna vez has sentido que tu día pasa en piloto automático? ¿Como si te despertaras, trabajas, comes, duermes… y repeat? ¡Amigo, eso no es vida, es un loop mortal! Hoy quiero hablarte de algo esencial: ¡Haz algo que te apasione cada día! Sí, cada. Maldito. Día.

La magia del propósito: El motor de la felicidad

¿Sabías que según el Zóhar, cada alma tiene una chispa única que brilla más cuando sigue su propósito? . Pues bien, esa chispa es la que debemos alimentar diariamente con las cosas que nos hacen vibrar, desde dibujar, bailar, cocinar hasta escribir o pasear en el parque. El truco es encontrar eso que enciende tu fuego interno y hacerlo tu ritual diario.

El peligro de no seguir el corazón: ¡Cuidado con el Modo Zombi!

Cuando ignoramos lo que amamos y nos dejamos atrapar por la rutina, la vida pierde su color. Dejas de sentir la magia de cada día y entras en lo que yo llamo el “Modo Zombi”, ese estado en el que simplemente sobrevives en lugar de vivir. No estás solo: muchos se pierden en este pantano sin darse cuenta. Pero aquí va la buena noticia: ¡nunca es tarde para despertar!

Conexión con el día a día: pequeños actos, grandes cambios

No te estoy pidiendo que renuncies al trabajo o te vayas a vivir a una cabaña en el bosque (a menos que eso sea lo que deseas). Empezar puede ser tan simple como dedicar 10 minutos al día a algo que te apasione. La Kabbalah nos enseña que el cambio ocurre en pequeños pasos constantes . Así que, ¿por qué no empezar hoy?

Ejemplos de pequeñas dosis de pasión:

¿Te gusta la música? Pon tu canción favorita al levantarte.

¿Amante del arte? Dibuja un boceto mientras tomas tu café.

¿Te apasiona escribir? Dedica unos minutos a un diario personal.

¿Disfrutas del ejercicio? Sal a caminar o estira esos músculos.

La energía detrás de la pasión: ¡Todo vibra diferente!

Cuando seguimos nuestro corazón, algo curioso pasa: la energía cambia. Te sientes más ligero, más positivo, y esa vibra se contagia. Como el ketóret que armoniza el universo y calma la severidad cósmica , nuestras pasiones nos alinean con la versión más pura de nosotros mismos. Además, vivir con propósito atrae oportunidades como imán. ¿Coincidencia? Yo creo que no.

Los riesgos de quedarte parado: El tiempo no perdona

El Zóhar y los sabios místicos lo advierten: la vida es demasiado corta para dejar nuestros sueños guardados en un cajón . Si hoy no haces algo que te apasione, mañana tampoco lo harás… y cuando te des cuenta, habrán pasado años. Así que deja de postergar lo que realmente amas.

El desafío: 7 días de pasión

Te reto a hacer algo que te apasione cada día durante una semana. Sin excusas. Si te encuentras diciendo “mañana empiezo”, ¡detente ahí! Ese es el ego boicoteando tu felicidad. Empieza ahora, aunque sea con un pequeño paso. Y ya verás cómo cambia todo.

En resumen, no esperes a que llegue el “momento perfecto”. No necesitas permiso ni aprobación de nadie para vivir apasionadamente. La vida es un escenario y tú tienes el papel principal, así que haz que cada escena cuente. ¿Listo para romper el ciclo y seguir tu corazón? ¡La magia está en tus manos!

¿Qué es lo primero que vas a hacer hoy para alimentar esa pasión? ¡Vamos, cuéntame!

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