¡Hola a todos! Quiero compartir con ustedes algo importante que he estado reflexionando sobre: la armonía en el amor y cómo la compasión juega un papel fundamental en ella.
El amor tiene dos aspectos: Jésed y Guevurá. Jésed es la parte de dar amor sin límites, mientras que Guevurá es la parte de disciplina y establecimiento de límites en el amor. La armonía en el amor se logra cuando encontramos un equilibrio entre estos dos aspectos, y agregamos empatía y compasión a la mezcla.
A menudo, damos amor con la expectativa de recibir amor a cambio, pero el amor compasivo es diferente. Se da desinteresadamente, sin esperar nada a cambio, incluso cuando el otro no merece amor. Se trata de ser generoso y amable con todos, incluso con aquellos que nos han herido.
Hoy les propongo un ejercicio para practicar la compasión y el amor desinteresado: ofrecer una mano solidaria a un extraño. Puede ser algo tan simple como ayudar a alguien a cargar sus bolsas o simplemente ofrecer una sonrisa amable. Estos pequeños gestos pueden marcar una gran diferencia en el día de alguien más y pueden crear una conexión y armonía en nuestras relaciones con los demás.
Recuerden que la armonía en el amor es posible cuando combinamos la disciplina y la empatía. Sigamos trabajando juntos para crear un mundo lleno de amor, compasión y armonía. ¡Vamos a practicar el amor desinteresado y ofrecer una mano solidaria para hacer de nuestro mundo un lugar mejor!
