Voy a platicarles la historia de una amiga que ha escrito su diario desde que tenía 7 años, ahora tiene 45 y, por supuesto, conserva todos sus diarios en su biblioteca.

Conversando con ella, me contó que era muy emocionante ver lo que escribía cuando era niña; por ejemplo:A los 7: Hoy comí sopita de letras como a mí me gusta, mi mamá es muy bonita.

A los 12: En la escuela hicimos un juego en la clase de mate y fue muy divertido.

A los 16: Conocí a un chavo súper guapo más grande que yo, ojalá me pele.

A los 28: El día más hermoso de mi vida, ¡hoy me caso!

A los 31: Voy a tener a mi bebé y estoy muy nerviosa; deseo que todo salga bien.

Y estas son solo pequeñas frases de sus diarios.

Yo estaba fascinado con su historia y me arrepentí tanto de no haber escrito mi diario, y nada más por desidia no lo hice.

Tantas cosas de mi infancia y juventud que hoy no recuerdo y me encantaría traer a mi memoria y revivirlas para siempre.

Esto me dejó pensando en que aún es tiempo de hacerlo, aunque no tengas 7 años, te queda mucho por vivir. No pierdas la oportunidad de recordar quién fuiste y qué hiciste, empieza hoy, no importa tu edad.