¿Cuántas veces vivimos situaciones complicadas, pero seguimos en medio de ellas porque esperamos que algo suceda para poder avanzar?
¿Cuántas veces aletargamos las relaciones de trabajo o las personales, con la esperanza de que algún día puedan cambiar?
Pero si pasa, y es catastrófico, pues las cosas acaban mal. Terminas cansado de la situación, dolido, peleado, desanimado, sin esperanzas.
Dice una frase: Primero la vida te da una oportunidad, después te obliga.
La vida todos los días te dice: No está funcionando, por qué no mejor cierras el ciclo antes de que sea más doloroso. Y claro, nosotros seguimos ahí.
Después llega la catástrofe, y la vida te obliga a que tomes una decisión.
Por ello, no esperes a que llegue una catástrofe para cambiar de planes, toma tú la iniciativa cuando sientas que es tiempo de cambiar y cuando la vida te diga que lo hagas.
