
Libérate de la amargura,
de la tristeza,
de la envidia,
del egoísmo,
de los rencores,
de las malas caras,
de pensar mal de los otros,
de las clasificaciones absurdas y baratas.
Libérate de todo lo negativo que pueda privarte de ser una persona feliz y honesta, llena tu vida de alegrías, vive, ríe, ama, perdona, disfruta la vida, se feliz, porque el tiempo pasa y las oportunidades se agotan.
Solo tendrás la paz que necesita tu alma, cuando aprendas a ser feliz contigo mismo, cuando decidas recargarte de energía positiva y libérate de todo lo que te hace daño.